No trabajo en un Zoo , aunque a diario me codeo con mucho animal.Pero esta tarde ha vivido un dulce encuentro, una Hurraca ha venido a hacerme compañia , no pidio como moneda de cambio ni mis anillos ni ningun derivado del metal que poseia.Era pequeña, simple y le conferia un punto de ternura su evidente vulnerabilidad y ser presa del pavor con cualquier movimiento brusco que coordinase.Me miraba esperando caricias en su craneo de hueso de Melocotón ; mientras satisfacia su anhelo , me observaba intercalando eléctricos movimientos de cuello.
Su pico desproporcionado , su mirada recelosa , esquiva y desconfiada, su elegante estampa negra en perfecta armonica cromática con el torax blanco y sus garras....Me asusté , vacilé unos instantes , pero pronto supe que todo lo que vi era verdad y que no se trataba del Cobrador el Frac.